Granallado

El granallado es un proceso de trabajo en frío que se utiliza para producir una capa de tensión residual compresiva y modificar las propiedades mecánicas de un componente. Consiste en impactar una superficie con perdigones, aplicando la fuerza suficiente para crear una deformación plástica. Cada disparo golpea la pieza como un martillo de bola y forma un pequeño hoyuelo. Los granos de la superficie del material se doblan en tensión, mientras que debajo de la superficie, los granos comprimidos del material intentan recuperar su forma, creando una zona muy estresada en compresión. Los hoyuelos superpuestos crean una capa uniforme de tensiones residuales en compresión sobre la superficie del material.